En la serie
Bodies, traducida como "Cadáveres" nadie sabe porque, se empastela
como siempre el problema del tiempo, toda película o serie que se mete con el
asunto del tiempo hace agua por todos lados. Por eso dice Agustín de Hipona,
sin que nadie se lo estuviese preguntando, que cuando nadie se lo pregunta él
sabe lo que es el tiempo, pero apenas alguien se lo pregunta ya no sabe qué es.
Y es porque el
tiempo es una verga jodida de entender y de explicar más. Creo que nadie, en su
sano juicio, ha intentado explicar lo qué es el tiempo.
La serie Bodies
es que hay un carajo que viaja al pasado, a 1800 y tantos para que algo pase en
el futuro. Pero resulta que cuando el carajo viaja al pasado, la vaina ha
ocurrido en el futuro tal como él lo ha querido.
Entonces, ¿para
qué coño e la madre tenía que viajar al pasado?
En verdad, el
puto viaje no tiene ningún sentido. Si ya la vaina se dio, qué vas a hacer en
el pasado si ya ha sucedido tal y como lo querías. Los mamertos que antes
viajaban al pasado y lo hacían para cambiar algo de allá que repercutiera en el
futuro, esto es, acá.
Viajaban al
pasado porque querían cambiar el presente en el cual vivían. Pero éste no. Vive
en el presente que quiere y viaja al pasado para producirlo. ¿Cómo es esa
verga?
O el guionista es
un mamerto o todos tenemos cara de comemierdas. La verga no tiene sentido,
porque el sentido de la serie es otro.
Es mostrar la
presencia de las llamadas minorías excluidas en roles protagónicos. Pero, para
esa verga podían haber agarrado cualquier tema, los cuales sobran a patadas. Y
no ponerse con esa mamaguevada.
Además, el tipo
modifica el futuro con una acción puntual, y no con una estética de la
existencia, para robarme la expresión del viejo Foucautl. Lo cual hace a la
serie más come mierda.
Meterse con las
paradojas del tiempo le sacan canas verdes a la gente. Por eso fue que Einstein
se dejó de esas vainas y en sus últimos años se dedicó a putear.
Además, para
rematar se mete con el coño problema del libre albedrío, el cual es otro grano
en el culo. De si somos libres o todo está determinado por quién sabe quién.
Ese es otro peo que el hombre arrastra encima desde que se le ocurrió pensar en
eso.
Pero bueno, cada
quién con su peo y a llorar pa´l Valle.
El problema de los
tres cuerpos
La serie ¨el
problema de los tres cuerpos¨ comienza echándole la cual a los chinos por haber
invitado a los extraterrestres a venir a la tierra y con los ingleses tratando
de salvar el planeta.
Una científica
china resentida y arrecha con el régimen del camarada Mao invita a estos
carajos de otra galaxia a venir a esta tierrita. Ni pendejos los
extraterrestres no se vienen de una vez, sino que van tanteando el camino para
saber cómo es la vaina por estos lados.
Los ingleses no
sabemos cómo se enteraron de esta invitación y andan siguiendo la pista de este
asunto intergaláctico.
Lo bueno de la
serie es que toda es vaina ocurre en Europa. Porque por estos lados estamos
preocupados por la bombona de gas, cómo echarle gasolina al carro, el que tiene
carro; el que no tiene trata de no morirse asfixiado o de una arrechera en el
Metro. Vainas propias de nosotros y no esas mariqueras de otras galaxias.
Solo mentes
brillantes hay en la serie. Los pendejos no cuentan porque se trata de un
asunto interestelar. No es ninguna pendejá el asunto. Pero, las guerras siempre
la hacen los pendejos, la carne de cañon.
Lo que les pasa a
esos carajos de otra galaxia es que tienen tres soles. Si nosotros tenemos uno
y lo llamamos el trimardito. Cómo lo llamaran ellos, no sabemos. Pero los tres
soles los tienen vuelto verga, no los dejan prosperar ni andar a sus anchas. Y
cómo. Quién coño va a ir a la playa en una vaina donde hay tres soles.
Viven todo el
tiempo cagándose en la puta madre que los parió, porque los soles no los dejan
ni respirar.
Todo va bien,
deciden venirse para esta vaina. Claro, seguro que están pensando llegar a
Europa. Ni de verga que van a llegar a Maracaibo, o a Pericantar, o a
Charallave. Ni de verga.
Si llegan por
estos lados, lo primero que les puede pasar es que les roben esas naves
espaciales del coño. O los inviten a beber aguardiente, como le pasó a Colón, y
después no se sabe quién es quién.
Además, esos
intergalácticos que esta tierra la gente dice mentiras, y esa vaina no les
gusta. Ellos solo dicen la verdad y nada más que la verdad. Pero aquí hay el
cobero parejo, el embustero, el doble cara y eso no va con esos carajos. Así
que deciden que quienes los estaban ayudando lo jodan los ingleses, por
embusteros.
La vaina es que
cuando la muchedumbre se entera de que los galácticos vienen, la serie se
tuerce y agarra un rumbo normal, aburrido, la misma vaina de siempre. Porque
empieza la mariquera de siempre, esa de salvar al planeta.
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